El minimalismo triunfa en las interfaces.
Primero debemos entender que el UX es lo qué te hace sentir una marca o producto al momento de interactuar con él, mientras que UI es una capa visual de colores, texturas, formas y elementos.
El retorno del diseño minimalista a las interfaces de usuario es una tendencia que ha tomado fuerza. Hoy en día existen productos digitales con un amplio catálogo de servicios en un solo lugar y existe la necesidad de simplificar el vocabulario, refinar el mensaje o mejor, ser más directo. Se evidencia una disminución de elementos decorativos, paleta de colores, ventanas emergentes y otras distracciones para que el usuario esté más orientado a la realización de la tarea. Esto ha generado una ola de estilos visuales interesantes y re-diseños de aplicaciones que van a atraer posiblemente diferentes tipos de usuarios a estas interfaces.
Neomorfismo: Esta es la habilidad de hacer que un elemento sobresalga de la pantalla. Es una mezcla entre una imagen plana y una imagen 3D. Por ejemplo, un usuario que navega en busca de un sofá puede colocar el cursor sobre el producto y éste sobresaldrá de la pantalla, haciéndose más 3D. Esto permite nuevas formas de interactuar con productos y nuevas maneras de construir interfaces más atractivas y que poseen una cualidad casi táctil.
Visualización de datos: Ser capaz de encontrarle sentido a grandes cantidades de datos rápidamente es una parte crítica de la experiencia de usuario de muchas apps, sitios o servicios. Actualmente, los diagramas, gráficos, circulares, mapas y carteles desplazables son solo algunas de las formas que utilizan los diseñadores para abordar este reto. Encontrar nuevas opciones para presentar datos en una manera fácil de digerir que sea visualmente atractiva e interesante es una tendencia (así como un reto a nivel de diseño) que esperamos ver en el 2022.
Elementos visuales inmersivos 3D: Volviendo a la idea de 3D, las ilustraciones ya no son simplemente una experiencia plana de dos dimensiones. Las ilustraciones 3D le permiten al consumidor experimentar los productos con mayor profundidad en línea, desde comprar zapatos a remodelar la cocina virtualmente. Los elementos visuales 3D se vuelven cada vez más populares debido a la mayor conexión que le brindan a los usuarios. Con más y más herramientas en el mercado para crear ilustraciones 3D (como Maya, Houdini y SculptGL), los diseñadores están refinando su oficio y podemos esperar ver más productos y servicios 3D.
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